viernes, 24 de abril de 2009

LÍRICA CORAL ARCAICA



1. CARACTERÍSTICAS GENERALES DE LA LÍRICA CORAL
2. ALCMÁN Y SUS CANTOS DE DONCELLA
3. ESTESÍCORO DE HÍMERA
4. LA CUESTIÓN DEL SUBGÉNERO LÍRICO EN ÍBICO


La lírica coral de Grecia recibirá tratamiento en dos entradas diferentes. En la primera hablaré de la lírica coral del Arcaísmo: de sus características generales, de la obra de Alcmán, de Estesícoro y de Íbico.
Como introducción al tema, mira Adrados (1988), así como dos trabajos de Suárez de la Torre (1988 y 2002):
SUÁREZ DE LA TORRE, E., “La lírica griega”, en D. Estefanía et alii (eds.), Cuadernos de Literatura Griega y Latina. II. Géneros literarios poéticos grecolatinos, Madrid-Santiago de Compostela, 1998, pp. 63-105.
SUÁREZ DE LA TORRE, E., “Introducción”, en Antología de la lírica griega arcaica, Madrid, 2002, pp. 9-64.


1. CARACTERÍSTICAS GENERALES DE LA LÍRICA CORAL

Inicio la entrada con un recordatorio de lo que se entiende habitualmente por lírica coral:
Lírica compuesta para ser ejecutada por un coro que canta y baila, con acompañamiento musical de por lo menos la lira.
Tradicionalmente se ha entendido además que, por oposición a la lírica monódica, la coral presenta mayores complicaciones métricas, así como una menor presencia del “yo poético”.
Tales puntos de vista (que, por ejemplo, son los representados por el clásico de Bowra 1961, 2ª ed.) han sido cuestionados en la bibliografía de finales del siglo XX, y en este sentido ha de hacerse una referencia especial a Davies (1988).
Davies duda, como otros antes que él, de que a Estesícoro e Íbico se los haya de considerar como poetas corales y no, más bien, como monódicos.
Acaso la solución venga por entender que la distinción no ha de establecerse entre poetas monódicos y corales sino entre composiciones monódicas y corales.
Asimismo es obligado hablar de los distintos intentos de establecer subdivisiones dentro de la lírica coral y de la operatividad de tales subdivisiones.
Para el caso de dos formas concretas de himno, peán y ditirambo, véase Käppel (1992) y Zimmermann (1992).
Éste es también el momento de recordar que, con anterioridad a los primeros autores conservados, compusieron también lírica coral otros poetas (Eumelo, Terpandro, Arión) que para nosotros son poco más que nombres.


2. ALCMÁN Y SUS CANTOS DE DONCELLA

Nos hallamos sobre un terreno más sólido en el caso de Alcmán, quien estaba activo en Esparta a finales del S. VII a. C. (West 1992).
Por cierto que, en ocasiones, se ha supuesto que Alcmán no sería oriundo de Esparta sino de Sardes (Asia Menor).
La parte más importante de la producción de Alcmán (conocida, según lo habitual, en forma fragmentaria) la representan sus dos cantos de doncella (partenios) recuperados a través de los papiros.
  • Se trata, obviamente, de cantos compuestos para ser ejecutados por coros de muchachas, posiblemente en el marco de ritos de iniciación (mira Calame 1977).
  • Alcmán no dirigía personalmente estos coros sino que lo hacía una muchacha (mira el Fr. 1 Davies, v. 44): con todo, conocía a las que integraban el coro, sus nombres, sus características y las menciona; así se aprecia en el primer partenio (“Partenio del Louvre”):
Pero yo canto / de Ágido la luz.
La cabellera / de mi prima / Hagesícora florece / como oro puro.
Ello indica, evidentemente, la proximidad del texto conservado a las circunstancias de su ejecución, posiblemente a su primera y única ejecución.


3. ESTESÍCORO DE HÍMERA

A caballo entre los siglos VII y VI (mira López Eire 1974) ha de situarse a Estesícoro de Hímera.
Según indicábamos antes, en su caso ha sido especialmente discutido que su poesía sea auténtica lírica coral.
Algunos ven en él a un citarodo que creaba composiciones de enorme extensión, no aptas para la ejecución coral aunque sí para el canto monódico.
En relación con Estesícoro ha de destacarse además su manejo frecuente de materia épica, aspecto que llevó a algunos críticos a entender que su poesía es, en realidad, epopeya no hexamétrica.
De otro lado, son diversas las razones que invitan a ver en Estesícoro un eslabón perdido entre la lírica coral y la tragedia del siglo V: al menos su influjo temático sobre Eurípides puede sustantivarse sin excesiva dificultad.
De la abundante producción fragmentaria de Estesícoro se deben destacar los casos de

1) La Helena y las Palinodias por lo que implican de innovación en el tratamiento de la materia épica; mira lo que dice Platón, Fedro 243 a:
Estesícoro perdió la vista por hablar mal de Helena; y no le pasó desapercibido el motivo de ello (según le ocurrió a Homero) sino que, como estaba inspirado por las Musas, entendió la causa de su ceguera y al punto compuso lo de

“No es cierto ese dicho,
y ni fuiste en las naves de buenos bancos
ni llegaste a la fortaleza de Troya”.

Y tras componer toda la llamada Palinodia recobró instantáneamente la vista
(trad. José B. Torres).
2) La Gerioneida.

3) La llamada Tebaida; mira el papiro de Lille (Fr. 222b Davies), vv. 201-8 (Yocasta habla con el adivino Tiresias):
A mis dolores no añadas terribles preocupaciones,
ni en el futuro
me muestres gravosas expectativas;
pues que siempre de igual forma
sobre la sagrada tierra se enfrenten los mortales con la disputa 205
o con la concordia no lo dispusieron los dioses inmortales,
y [día a día] la mente de los hombres
los dioses transforman (trad. José B. Torres).


4. LA CUESTIÓN DEL SUBGÉNERO LÍRICO EN ÍBICO

La cuestión del subgénero lírico se plantea igualmente en el caso de Íbico de Regio (S. VI a. C.; mira Barron 1969 y Woodbury 1985).
De él se ha dicho que emplea las formas corales para desarrollar temáticas monódicas en su poesía, que con frecuencia trataba temas eróticos. Como contexto de estos poemas cabe imaginar la corte del tirano Polícrates de Samos.
Es interesante detenerse a leer lo que el poeta nos sugiere sobre su propia actividad en el poema dedicado a Polícrates (mira Woodbury 1985). En lo que conservamos de este poema, Íbico trata el tema de la saga troyana a través de rápidas alusiones o flashes.
En la primera tríada, en sólo nueve versos (1-9) nos encontramos ya con una síntesis de toda la guerra (motivo de la expedición, procedencia de quienes la acometieron y resultado de la empresa):
] del Dardánida Príamo
la gran ciudad, afamadísima, opulenta, saquearon
de Argos partiendo,
del gran Zeus por voluntad,
por la figura de la rubia Helena
combate muy cantado manteniendo
en la guerra luctuosa;
al desdichado Pérgamo ascendió el infortunio
por Cipris de rubia cabellera
(trad. José B. Torres).
Nótese que Íbico rechaza la exposición detallada de la materia troyana.
Es que a él le interesa aprovechar la reminiscencia épica en otro sentido: para establecer (en las tríadas siguientes) la comparación entre su patrono y los héroes de la leyenda, con quienes comparte la belleza.
Y, acaba diciendo, el conocimiento de esa belleza de Polícrates depende de que su fama sea extendida por la poesía de Íbico:
Entre ellos [entre los héroes del mito] siempre por tu belleza
también tú, Polícrates, gloria inmortal tendrás,
así como por el canto y por mi fama (vv. 46-48,
trad. José B. Torres).

José B. Torres Guerra


ALGUNAS REFERENCIAS:

* Trabajos de carácter general e introductorio:
ADRADOS, F.R., “Lírica arcaica coral”, en J. A. López Férez (ed.), Historia de la Literatura Griega, Madrid, 1988, pp. 168-184.
BOWRA, C.M., Greek Lyric Poetry from Alcman to Simonides, Oxford, 1961, 2ª ed. [1936].
DAVIES, M., “Monody, Choral Lyric, and the Tyranny of the Handbook”, CQ 38 (1988), pp. 52-64.
DAVIES, M. (ed.), Poetarum Melicorum Graecorum Fragmenta, vol. I. Alcman. Stesichorus. Ibycus, Oxford, 1991.
KÄPPEL, L., Paian: Studien zur Geschichte einer Gattung, Berlín-Nueva York, 1992.
PAGE, D.L. (ed.), Poetae Melici Craeci, Oxford, 1962.
PAGE, D.L. (ed.), Supplementum lyricis graecis: poetarum lyricorum graecorum fragmenta quae recens innotuerunt, Oxford, 1974.
PAVESE, C.O., La lirica corale greca, Roma, 1979.
ZIMMERMANN, B., Dithyrambos. Geschichte einer Gattung, Gotinga, 1992.
* Sobre Alcmán:
CALAME, C., Les choeurs de jeunes filles en Grèce archaïque. II. Alcman, Roma, 1977.
GENTILI, B., “Il Partenio di Alcmane e l'amore omoerotico femminile nei tiasi spartani”, QUCC 22 (1976), pp. 59-67.
JANNI, P., La cultura di Sparta arcaica. Ricerche, Roma, 1965-70.
PAGE, D.L., Alcman, the Partheneion, Oxford, 1951.
PAVESE, C.O., “Alcmane, il Partenio del Louvre”, QUCC 4 (1967), pp. 113-133.
WEST, M.L., “Alcman and the Spartan Royalty”, ZPE 91 (1992), pp. 1-7.
* Sobre Estesícoro:
ADRADOS, F.R., “Propuestas para una nueva edición e interpretación de Estesícoro”, Emerita 46 (1978), pp. 251-299.
CALVO, J.L., “Estesícoro de Hímera”, Durius 2 (1974), pp. 311-342.
DAVIES, M.I., “Thoughts on the Oresteia before Aischylos”, BCH 93 (1969), pp. 215-260.
HOZ, J. DE, “El género literario de la Gerioneida de Estesícoro”, en AA.VV., Homenaje a A. Tovar, Madrid, 1972, pp. 193-204.
LÓPEZ EIRE, A., “Un poeta llamado Estesícoro: su encuadramiento cronológico”, EClás 18 (1974), pp. 27-60.
LÓPEZ EIRE, A., “Estesícoro, autor de Palinodias”, EClás 18 (1974), pp. 313-345.
PAGE, D.L., “Stesichorus: The Geryoneis”, JHS 93 (1973), pp. 136-154.
PARSONS, P.J., “The Lille 'Stesichorus'”, ZPE 26 (1977), pp. 7-36.
SIDER, D., “The Blinding of Stesichorus”, Hermes 117 (1989), pp. 423-431.
WEST, M.L., “Stesichorus”, CQ 21 (1971), pp. 302-314.
* Sobre Íbico:
BARRON, J.P., “Ibycus: to Polycrates”, BICS 16 (1969), pp. 119-149.
WOODBURY, L., “Ibycus and Polycrates”, Phoenix 39 (1985), pp. 193-220.